Explorar la costa caribeña de México puede ser una aventura mágica, sobre todo cuando hay lugares increíblemente hermosos como la Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an. La reserva natural de Sian Ka’an se extiende a lo largo de 120 kilómetros de costa; de Tulum a Muyil, es el área protegida más grande de la Riviera Maya. Su inmensa biodiversidad y variedad de lugares arqueológicos la convierten en el lugar perfecto para aquellos que aman la aventura.
El Origen del Cielo
Sian Ka’an significa “El origen del cielo”, y hace mucho fue habitado por los antiguos mayas que dejaron detrás 23 sitios arqueológicos distintos. Un extenso sistema de canales se teje entre los manglares y las lagunas mágicas y se cree que fue usado como ruta comercial entre las ciudades de Tulum y Muyil. Estos dos puntos estratégicos fueron de gran importancia para los mayas y su conexión fue crucial para su sociedad. Al igual que muchos otros lugares arqueológicos, una gran cantidad de artefactos y reliquias fueron dejados en el sitio y han ayudado a los investigadores a aprender acerca de la cultura maya. Aunque similar, la Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an es mucho más que las típicas ruinas mayas.
La reserva es el hábitat de algunas de las especies más diversas del mundo. Mamíferos carismáticos como el jaguar, el puma, el ocelote y el tapir centroamericano viven dentro de las 969 mil hectáreas que forman las tierras de la Reserva, que también proporciona un espacio para un gran número de aves migratorias, reptiles y vida marina. Muchas especies de flora y fauna habitan en esa área y están en peligro de extinción, por lo que su preservación es de extrema importancia. Por ésta y muchas otras razones, la Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an es un lugar ecológico que ofrece una experiencia de primer nivel para los amantes y admiradores de la naturaleza.
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